El calor extremo en el hemisferio norte, especialmente en el Desierto de Sonora, México, ha generado preocupación mundial sobre los límites de resistencia del cuerpo humano.

Tal y como se mencionó en la nota anterior, el Desierto de Sonora, México, superó los 80 grados Celsius, lo que ha convertido en una preocupación para la comunidad científica mundial.

Según un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Roehampton en Londres, el cuerpo humano puede resistir una «temperatura crítica superior» de entre 40 y 50 grados centígrados. Pero al superar estos niveles, el organismo sufre de «estrés térmico», que se manifiesta con confusión, náuseas, mareos, dolor de cabeza y desmayos.

El profesor Lewis Halsey y su equipo de investigadores de la Universidad de Roehampton llevaron a cabo un experimento en 2021 con hombres y mujeres para determinar los límites del cuerpo humano frente al calor. Observaron que cuando hace calor, nuestro cuerpo aumenta su tasa metabólica, es decir, la cantidad de energía que consume para mantenerse funcionando.

Cuánto calor es demasiado varía según cada persona, dependiendo de la edad, el sexo y cualquier afección médica previa. Algunas personas pueden soportar temperaturas más altas, mientras que otras alcanzan su límite alrededor de los 40 o 50 grados centígrados. Los bebés y los ancianos son especialmente vulnerables al calor extremo debido a que sus sistemas cardiovasculares no responden bien a altas temperaturas.

Cuando el cuerpo se calienta demasiado, las proteínas se desnaturalizan, lo que afecta el funcionamiento del sistema nervioso y el corazón. Esto puede provocar arritmias, bajos niveles de oxígeno en el cerebro y problemas de salud graves, incluso la muerte.

Estos conocimientos son cada vez más importantes en un mundo que se calienta debido al cambio climático. Se prevé que las temperaturas aumenten en el futuro debido a las crecientes emisiones de gases de efecto invernadero. Para evitar escenarios peligrosos, es vital tomar medidas para frenar el cambio climático, reduciendo las emisiones y dejando de depender de los combustibles fósiles.

Tenemos la capacidad de revertir esta situación y proteger la vida tal como la conocemos. ¡Depende de nosotros tomar acciones para preservar nuestro planeta y asegurar un futuro sostenible para todos!