El legendario exjugador y exentrenador de fútbol alemán, Franz Beckenbauer, falleció a los 78 años, según informaron fuentes cercanas a su familia.

Beckenbauer, conocido como «El Kaiser», dejó una huella imborrable en la historia del fútbol alemán. Campeón del mundo tanto como jugador en 1974 como entrenador en 1990, su legado trascendió las líneas del campo de juego. Su elegancia y visión táctica como defensa lo llevaron a la conquista de la Copa del Mundo de 1974, y su influencia perduró en el FC Bayern Munich, donde ganó la antigua Copa de Europa en tres ocasiones.

La transición exitosa de Beckenbauer de jugador a entrenador marcó una nueva era para la selección alemana. En 1990, guió al equipo hacia su tercer título mundial, consolidando su reputación como estratega excepcional.

En los últimos años, Beckenbauer se retiró de la vida pública debido a problemas de salud y al escándalo relacionado con presuntas irregularidades en su papel para obtener la sede del Mundial 2006 para Alemania. Aunque estos eventos empañaron su legado, no pueden eclipsar sus contribuciones significativas al fútbol.

Hoy, el fútbol alemán lamenta la pérdida de una leyenda. Beckenbauer no solo fue un maestro del deporte, sino también un arquitecto de sueños y un embajador de la unidad a través del juego. Su memoria continuará inspirando a las generaciones venideras a través de su amor por el juego bonito y la búsqueda constante de la grandeza en el fútbol.

La Federación Alemana de Fútbol y la comunidad deportiva se unen en luto por la partida de Franz Beckenbauer, recordando su impacto indeleble en el deporte y expresando sus condolencias a la familia y seres queridos del eterno Kaiser.

Descanse en paz, leyenda del fútbol alemán.