En el marco del Día Nacional del Medioambiente en Chile, Greenpeace destaca cuatro áreas críticas que requieren atención urgente: la crisis del agua, la protección de los océanos, la reducción del consumo de plástico y la gestión de desastres causados por decisiones humanas en el contexto del cambio climático.
Preocupante es el llamado de Alerta de Greenpeace, destacando cuatro desafíos ambientales cruciales que enfrenta el país. La organización internacional ha enfatizado el «estrés constante» que experimentan diversos ecosistemas en Chile y la urgente necesidad de abordar estas cuestiones.
La primera de estas preocupaciones se centra en la crisis hídrica que afecta al país. A pesar de las fuertes lluvias registradas este año en la zona centro-sur de Chile, el país lleva más de una década sumido en una sequía extrema, con múltiples impactos en la población. Esto ha afectado especialmente la producción agrícola y el acceso a servicios básicos en áreas rurales. Greenpeace ha señalado que el sistema actual de derechos de agua, vigente desde hace 30 años, ha permitido a empresas privadas acaparar recursos hídricos en detrimento de los usos vitales del agua. Según la Dirección General de Aguas (DGA), el 22,3 % de las comunas del país siguen bajo decretos de escasez hídrica, afectando al 17,3 % de la población.
La segunda urgencia resaltada por Greenpeace se refiere a la necesidad de proteger los océanos y su biodiversidad. La organización insta al Congreso chileno a ratificar el Tratado sobre la Conservación y Uso Sostenible de la Biodiversidad Marina más allá de las Jurisdicciones Nacionales (BBNJ, por sus siglas en inglés). Este tratado permitiría la creación de santuarios marinos y es fundamental para la preservación de los ecosistemas marinos. Greenpeace enfatiza la importancia de proteger las áreas marinas protegidas de la degradación causada por industrias como la salmonicultura.
La tercera preocupación está relacionada con el consumo y desecho de plásticos. Greenpeace destaca que en Santiago, la capital de Chile, se generan aproximadamente 1,3 kilogramos de basura por persona al día, situando al país como uno de los principales generadores de residuos en la región. La organización enfatiza la importancia de reducir el consumo de plásticos y fomentar prácticas de gestión de residuos más sostenibles.
Por último, Greenpeace aborda la cuestión de los desastres «socionaturales» derivados del cambio climático. La organización advierte que fenómenos climáticos extremos pueden dar lugar a desastres que no son meramente naturales, sino que son el resultado de decisiones tomadas en los territorios. Estos eventos extremos representan una amenaza significativa para la seguridad y la estabilidad del país.
Se requiere de acción inmediata y sostenible para abordar estas cuatro urgencias ambientales, directamente relacionadas al cambio climático, al cual somos frágiles como país, son uno de los grandes desafíos que requieren una respuesta concreta para salvaguardar el medio ambiente y el bienestar de la población chilena.





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