En la audiencia de formalización llevada a cabo este lunes por el caso del ciudadano peruano asesinado en Barrío Yungay, se decretó la prisión preventiva para el presunto autor de los disparos. Durante el proceso, el fiscal Francisco Jacir desveló un perturbador nexo entre la víctima y su supuesto homicida venezolano, evidenciando indicios de premeditación en el crimen.

Según consignó «La Tercera», el fiscal jefe de la Fiscalía Centro Norte afirmó que las investigaciones de los últimos cinco días revelan que ambas partes se conocían desde el día anterior al fatídico suceso, información proporcionada por la pareja de la víctima.

A pesar de que el ciudadano peruano ingresó al país como turista en abril, el Ministerio Público señaló que tenía intenciones comerciales en Chile, específicamente relacionadas con la venta de zapatillas, lo que podría haber sido motivo de conversación con el hombre que finalmente le arrebató la vida.

El fiscal explicó que el presunto homicida tenía interés en vender su automóvil, aunque aún no está claro si este tema estaba siendo discutido con la víctima.

La premeditación del crimen, destacada como un agravante por el Ministerio Público, se fundamenta en que el autor citó a la víctima para la mañana del 1 de mayo en diferentes lugares, hasta encontrarse en el sitio donde ocurrió el fatal encuentro. El tribunal ha solicitado más tiempo para profundizar en las investigaciones y esclarecer todos los aspectos del caso, incluyendo los sucesos previos al crimen.